Reflexión sobre Migraciones, creencias y hospitalidad en la VI Jornada Tradiciones Religiosas y Paz

El Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) de Valencia organizó la ‘VI Jornada Tradiciones Religiosas y Paz’, una oportunidad en la que se reflexionó en torno a la cuestión de las ‘Migraciones, creencias y hospitalidad’ y sirvió para tomar conciencia e inspirarnos sobre cómo vivimos nuestra experiencia de hospitalidad en entornos de vulnerabilidad en el contexto actual.

En el encuentro, desarrollado en el salón de actos del Centro Arrupe Jesuitas de Valencia, participó el secretario autonómico de Familia y Servicios Sociales, Ignacio Grande. También tuvimos la ocasión de escuchar la reflexión de la presidenta de la Asociación de Teólogas Españolas (ATE) y profesora de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de la UCV, Montserrat Escribano.

Abrió esta sexta edición de la Jornada Tradiciones Religiosas y Paz el padre Darío Moya SJ, que apuntó la necesidad de dialogar sobre «cómo es posible unirnos y hacer más profunda la hospitalidad con aquellos que se acercan a nosotros, muchas veces después de mucho sufrimiento». Para el P. Mollá, «la hospitalidad tiene un punto de partida y es que aquellos que vienen, se encuentren a gusto en nuestra casa». No obstante, esta hospitalidad también presenta «un horizonte» que es que los que vienen también «se encuentren en su casa».

Un momento de la intervención del P. Darío Mollá SJ

Ignacio Grande Ballesteros: «Tenemos un gran objetivo de organizar sociedades justas, donde se ponga en el centro a la persona».

Por su parte, Ignacio Grande, secretario autonómico de Familia y Servicios Sociales, señaló que «tenemos un gran objetivo que es el de ordenar y organizar sociedades justas, donde se ponga en el centro a la persona, a su dignidad, y consigamos garantizar que cualquier persona, sin importar la edad, su condición u origen pueda acceder a sus derechos como persona y pueda desarrollar, desde su libertad, su proyecto de vida».

Es clave, a juicio del secretario autonómico, que si se habla de dignidad y de derechos «tenemos que hablar del respeto absoluto hacia todas y cada una de las dimensiones de la persona y como administraciones no basta única y exclusivamente con el respeto a las manifestaciones externas de la fe, sino que debemos garantizar la debida consideración de la dimensión pública de las manifestaciones religiosas».

Destacó Grande Ballesteros términos «importantísimos en estos tiempos» como los de «acogida o cuidado» puesto que detrás de palabras como acoger o cuidar «se esconden determinadas actitudes necesarias en nuestro mundo». Consiste en «huir del juicio, huir del prejuicio», en reconocer en cada una de las personas, «por encima de su condición o de su origen, la dignidad absoluta». «Y hablar de dignidad es hablar de derechos», explicó Ignacio Grande.

Cuando se habla de derechos humanos intervienen varias realidades: en primer lugar, el «garante del derecho» son las administraciones «que somos las responsables de asegurar que los derechos humanos sean respetados, sean protegidos y sean cumplidos. A día de hoy nos podemos preguntar, ya que vivimos en un mundo de contradicciones, si esa declaración de los derechos humanos de hace más de 70 años, por desgracia, se cumple o no se cumple».

En la segunda realidad, según el secretario autonómico de Familia y Servicios Sociales, «el responsable de los derechos es la sociedad civil, son las personas, los grupos, las entidades que tenemos obligaciones éticas y morales en relación con los derechos humanos». Por tanto, «hoy puedo manifestar que todas y cada una de las personas que estamos aquí somos responsables de esos derechos».

Ignacio Grande, secretario autonómico de Familia y Servicios Sociales

MONTSERRAT ESCRIBANO CÁRCEL: «Que se nos conceda la gracia de ser hospitalarios, de ser refugio».

Montserrat Escribano, presidenta de la Asociación de Teólogas Españolas (ATE), intervino para señalar que no hay que conformarse con la realidad que vivimos porque «siempre nos parece pequeña, estrecha y en la que continuamente se hacen presentes esas situaciones de dolor, de violencia o de injusticia». Se trata de situaciones que nos reclaman poner «una mirada atenta» para que podamos escucharlas. Por ello, «nuestras creencias nos piden la hospitalidad», destacó Escribano Cárcel. «Acoger lo que se presenta es tener una mirada hospitalaria», para lo que se hace necesario rezar a fin de que «se nos conceda la gracia en nuestra vida de ser hospitalarias, de ser refugio, o al menos de aliviar a los otros».

«Cada una de nuestras tradiciones religiosas o espirituales no descansan, siempre permanecen en movimiento, en salida», expuso la profesora de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia. Esta circunstancia nos provoca una pregunta: ¿Hacia dónde nos llevan nuestras migraciones?, ¿hacia dónde nos llevan nuestros desplazamientos? «Cada una de nuestras sabidurías nos ofrecen siempre orientaciones, pequeñas señales, formas de atender y de buscar en medio del mundo», dijo Montse Escribano. 

«Esa cercanía, esa posibilidad de un Dios, nos lleva también a provocar cambios profundos y nos impulsa siempre a novedades, a algo que está por venir, nos hace aproximarnos a lo que es distante, a lo que es ajeno, nos invita al renacimiento de lo que no es como yo, de la alteridad, de lo que está más lejos», continuó. Precisamente lo que nos es ajenos a veces provoca miedo, incertidumbre o rechazo, y sentir todo esto es humano, «es previsible, pero, no puede ser lo único». «La fe siempre nos pide ir más allá, dar un paso más, desplazarnos, como dice el filósofo Josep María Esquirol, aunque solo sea un palmo de donde estamos».

Montserrat Escribano durante su charla

Tras las intervenciones mencionadas, la VI Jornada Tradiciones Religiosas y Paz desarrolló un diálogo bajo el lema «Religiones, movilidad humana y capacidad de acogida y cuidado. Iniciativas de hospitalidad en clave creyente». En el mismo participaron Susana Torrella, representante de la Fe Baha´i de Alicante; Pepe Real, de Cáritas Valencia; Swami Rameshwarananda Giri, representante de la Comunidad Védica de España; y Ángel Vicente Palos, del Consell Evangèlic de la Comunitat Valenciana.

Tras una pequeña pausa, se presentó y visitó el espacio «Valencia Interreligiosa», un lugar que sirve para trabajar la pedagogía de la convivencia en sociedades plurales.

La jornada concluyó con una oración contemplativa con el Foro Interreligioso Internacional (FIIT) TRANSCENDENCE. La oración fue conducida por Rosa Ortí, carmelita de la caridad Vedruna; Ihab Fami; de la Comunidad Islámica de Valencia; Swamini Dayananda Giri, de las religiones de la India; Marilda Azulay; de la Federación de Comunidades Israelitas; Paloma Alba; del Centro Budista Nagarjuna Valencia; y María Moreno; de Brahma Kumaris.

Esta noticia se ha podido redactar gracias a la información y a las fotos facilitadas por Betzhabet Melo.