Con motivo del Día Internacional del Voluntariado, este 5 de diciembre, se llevó a cabo una emotiva jornada en el Centro Arrupe Valencia, para rendir homenaje al invaluable impacto social que generan las personas voluntarias.

La actividad reunió tanto a voluntarias y voluntarios activos, como al personal de las obras e iniciativas sociales de los Jesuitas en Valencia: Servicio Jesuita a Migrantes (SJM), Entreculturas, ECCA Social y Centro de Escucha (San Camilo).

La celebración comenzó con un cortometraje y una dinámica grupal que fomentó la reflexión sobre las injusticias, desigualdades e inequidades sociales que afectan a gran parte de nuestra sociedad.

El espacio permitió compartir ideas y sentimientos, así como fortalecer el sentido de solidaridad, servicio y defensa de los derechos de las personas más vulnerables. Se destacó la importancia de educar nuestra mirada hacia las problemáticas sociales, cultivar los valores y principios que guían el voluntariado, y ser cada vez más conscientes y comprometidos.

Uno de los momentos más destacados de la jornada fue el reconocimiento a las personas voluntarias que, desde hace diez años, acompañan a los detenidos en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE).

Entre ellas, María Cinta, voluntaria desde 2017, compartió su conmovedora experiencia de acompañamiento a los presos. Su testimonio reflejó la perseverancia, dedicación y amor con los que, semana tras semana visita a los detenidos, les brinda apoyo en sus necesidades básicas, los escucha, defiende sus derechos y fomenta actividades que favorecen su bienestar emocional y psicológico. Este voluntariado contribuye a hacer más llevadero el proceso jurídico de los inmigrantes en una situación de injusta privación de libertad.

La directora del SJM Valencia, Cecilia Villarroel, cerró la jornada con unas palabras de aliento, destacando el valor y la gratuidad del voluntariado, que con su tiempo y esfuerzo forma parte esencial del trabajo de las organizaciones.

En un contexto marcado por tragedias como la ocurrida por la DANA, la directora del SJM resaltó la importancia de la solidaridad y el compromiso social, recordando que cada acción, por pequeña que sea, tiene un impacto positivo y brinda esperanza a quienes atraviesan momentos difíciles.

La jornada culminó con un almuerzo compartido, un espacio para estrechar lazos entre las personas voluntarias y el equipo del sector social de la Compañía de Jesús en Valencia.  Y como gesto de agradecimiento, se les entregó un pequeño presente, que simboliza el compromiso y la labor transformadora del voluntariado.

En este Día Internacional del Voluntariado no solo se celebró la generosidad de quienes dedican su tiempo a una causa social, sino que también se renovó el llamado a seguir construyendo un mundo más justo y solidario.