El 31 de mayo tuvimos la quinta convivencia del grupo de ejercitantes y acompañantes. Valoramos el proceso vivido como muy positivo.
Si los Ejercicios son para elegir, para ordenar la vida desde el seguimiento de Jesús, cada uno ha recorrido su camino.
Nos ha ayudado la oración diaria, el compartir sencillo y los temas de formación los días de convivencia.
Ha sido una suerte haber contado con el padre Darío Mollá en varios momentos de la formación.
Quizás un elemento que tendríamos que recuperar es la eucaristía y la comida juntos los días de convivencia. Momentos bonitos para compartir.
Agradecemos al Centro Arrupe y a los acompañantes haber podido vivir esta experiencia tan honda que nos acerca a Jesús, a su evangelio y que compromete nuestra vida con los más desfavorecidos.
Fuente: BOLETÍN CIERRE DE CURSO 2025 – CENTRO ARRUPE
