Jesús quiere ir a Jerusalén, quiere anunciar la Buena Noticia en la ciudad de David. Hasta ahora le han seguido la pista gentes venidas de allí, ahora es él quien quiere ir al centro de Israel. Él tan sólo pretende reunir bajo las alas del Dios de la Vida a las gentes de Israel como la clueca cobija bajo sus alas a los pollitos.
El viaje es peligroso, pero Jesús sabe que la manifestación del Dios de la Vida para todo Israel se tiene que dar en Jerusalén, así volverá a ser el lugar dónde puedan acudir de todos los pueblos para encontrarse con la Fuente de la Vida y que Israel sea el lugar del conocimiento de Dios para todas las gentes. Jesús no puede eludir el viaje, todo su ser está tejido por la historia de su pueblo con su Dios.
La Buena Noticia de Jesús de Nazaret, Toni Catalá