Calendario de Adviento (22 diciembre)

Tras el gesto que te proponemos hoy, aceptar la ayuda que se te ofrezca, está la invitación a dejarse cuidar, a contar con los demás, a pedir ayuda y es que llegar a ser «tierra de acogida» también tiene que ver con la capacidad de abrirnos a lo que se nos ofrece.

Quizá, creencias como «no querer ser una molestia»,  o «poder con todo», o «no tener derecho a quejarme» se levantan como resistencias ante el dejarnos ayudar. Una vez más, José Carlos Bermejo nos ofrece una reflexión sobre esta experiencia:

«Muchas expresiones espontáneas avalan el miedo a ser una carga. Hay personas que en su vida son capaces de sacrificarse por los demás, de cuidar a otros casi sin límite, hasta el punto de negarse a sí mismo muchos deseos con tal de cuidar a los propios seres queridos. Sin embargo, sucede también que uno de los principales miedos confesados es el miedo a dejarse cuidar.

Dejarse cuidar es dar a los demás la oportunidad de desplegar el rol de cuidador, la solidaridad y la gratuidad. Dinámicas de egoísmo, narcisismo, estilos de vida muy independiente pueden aumentar en algunas personas la dificultad para dejarse cuidar. Diríamos que todos tenemos la experiencia de haber sido cuidados; sin embargo, no todos han desarrollado a lo largo de la vida la disposición a dejarse cuidar, a contar con los demás, a reconocerse sanamente interdependientes, a tener el coraje de pedir ayuda…»

Dejarse cuidar